(Oliver, muy joven a la mano derecha de la foto, junto a Luis Cortés)
Suelo hacer públicas algunas cosas o palabras que en el mayor de los casos debiesen quedar en la privacidad. Sin embargo, comparto con mis seguidores este recuerdo, por lo histórico, este, por qué no decirlo, dolor, por haber perdido en el exilio y sin poder verlo nunca más desde su salida de Chile en 1975. Me refiero al poeta chileno Oliver Welden (1946-2021), quien no dejó más que sus escritos en el mundo, porque su cuerpo lo transformaron en polvo en una planificada incineración. Quedan, obvio, sus fotos, que son muchas, algunas nunca aparecidas en la prensa, y que también me envió a meses de morir.
Este escrito enviado por email en agosto de 2020, es decir a meses de su fallecimiento (murió a comienzos del 2021), deja de manifiesto esta amistad que comenzó en Arica-Chile y se extendió epistolarmente hasta su muerte:
"Carlos, He recibido un diagnóstico de cáncer pulmonar metastásico en avanzado estado, con una prognosis de tres a seis meses de vida.
Mi gratitud enorme por el apoyo que me has dado, la amistad que hemos compartido y el recuerdo de casi toda una vida -tú y yo´- en este oficio necesario de la poesía y literatura. Has sido un compañero extraordinario.
Un abrazo fuerte y sincero y un beso de hermano.
Namaste.."
Oliver Welden.