Los premios, los premios literarios: ¿qué son los premios literarios?. Hay quienes ganan muchos premios, dan vuelta la esquina y lo espera un premio, levantan el brazo y ahí está el premio. Curiosamente la vida de hoy se maneja con premios, y en lo profesional (de profesión sacada en la universidad) se manejan los títulos, la cantidad de estos. Es decir, vale más quien posee mayor cantidad de cartones con nombres de magíster, post grado, doctorado, en fin. Vale nada, casi nada, aquel profesor (por dar un ejemplo) que es raso, o mejor dicho, que solo tiene el "titulito" de maestro.
En cuanto a los premios, estos muchas veces se negocian. Y para eso se requiere de mucha influencia, de mucho lobby. Son contadas las ocasiones, distinguidas ocasiones, cuando alguien gana exclusivamente por méritos. Aquellos son los valiosos. Muchas editoras, por nombrar algo, hacen lobby para que alguno de sus escritores ganen premios. Esto, sin duda, les hace ganar más dinero. En otras palabras pasan a ser "sus escritores premiados". Estamos en un mundo de crueldad en todos sus ángulos. Pero lo peor de todo es que comienzan a crearse castas. Son las castas de "los que son y los que no son", de los que se movilizan en auto y los que usan "micrito", los bonitos y quienes hacen vida de feos. Los premios, sin duda, se negocian, están vinculados con las relaciones sociales más que por la calidad. Hay que ir a bares, a cafetines, ahí se negocian los premios. Respecto a esto guardo muchas experiencias que no son necesario comentarlas. Lo concreto es que ciertos magnates en el arte se van formando de esta manera. Y quienes no crean en esta forma o fórmula, es mejor perder esperanzas de llegar a ser reconocidos un día.
En cuanto a los premios, estos muchas veces se negocian. Y para eso se requiere de mucha influencia, de mucho lobby. Son contadas las ocasiones, distinguidas ocasiones, cuando alguien gana exclusivamente por méritos. Aquellos son los valiosos. Muchas editoras, por nombrar algo, hacen lobby para que alguno de sus escritores ganen premios. Esto, sin duda, les hace ganar más dinero. En otras palabras pasan a ser "sus escritores premiados". Estamos en un mundo de crueldad en todos sus ángulos. Pero lo peor de todo es que comienzan a crearse castas. Son las castas de "los que son y los que no son", de los que se movilizan en auto y los que usan "micrito", los bonitos y quienes hacen vida de feos. Los premios, sin duda, se negocian, están vinculados con las relaciones sociales más que por la calidad. Hay que ir a bares, a cafetines, ahí se negocian los premios. Respecto a esto guardo muchas experiencias que no son necesario comentarlas. Lo concreto es que ciertos magnates en el arte se van formando de esta manera. Y quienes no crean en esta forma o fórmula, es mejor perder esperanzas de llegar a ser reconocidos un día.
Escrito por Carlos Amador Marchant, en 19 de noviembre de 2016-Valparaíso.-
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